de la Formación del Espíritu Nacional al Fomento del Espíritu Empresarial en menos de dos generaciones

Ni el capitalismo, ni ningún otro orden social, pueden subsistir sin valores… Aunque los valores de unos sean los contravalores de los otros.

Borrador del proyecto de reordenación de la Educación Secundaria Obligatoria, a saber: Proyecto de orden ……/………., por la que se modifican la Orden ECI/2220/2007, de 12 de julio,  por la que se establece el currículo y se regula la ordenación de la Educación Secundaria Obligatoria y la Orden ECI/2572/2007, de 4 de septiembre, sobre evaluación en Educación Secundaria Obligatoria.

«(…) La sociedad actual se caracteriza por su carácter cambiante y la necesidad de adaptación permanente de los individuos. Los entornos de organización social y del trabajo se han transformado como consecuencia de la globalización económica, los cambios demográficos, y la importancia de las Tecnologías dela Informaciónyla Comunicación(TIC). Los nuevos patrones de producción y gestión requieren nuevas cualificaciones de los individuos, y generan la necesidad de nuevas competencias y habilidades, tanto para mantener la empleabilidad como para facilitar el desarrollo personal y social.

La nueva realidad se caracteriza por la desaparición de los empleos para toda la vida, un riesgo creciente de obsolescencia de habilidades básicas, una creciente necesidad de cualificación, y una progresiva valorización de las denominadas nuevas habilidades, especialmente aquellas relacionadas con las habilidades sociales y las relaciones interpersonales.

Los ciudadanos han de desenvolverse en un entorno en que la frecuencia de transiciones en el mundo laboral (cambio de empleo, desempleo, incorporación a la formación,…) será algo inherente a cualquier trayectoria profesional. Esto, junto a las necesidades de cualificación y formación a lo largo de toda la vida, hace que las habilidades para tomar decisiones en cada momento y gestionar la propia carrera formativa y profesional sean más necesarias que nunca. Las capacidades de adaptación se hacen primordiales para hacer frente a los imprevistos de la vida profesional y a las reorientaciones a lo largo de la carrera.

Al mismo tiempo, aparece una oferta de formación cada vez más diversificada, que permite diseñar itinerarios ajustados a las necesidades e intereses de cada individuo en cada momento. La complejidad social y económica y el acceso a una extensa gama de posibilidades de aprendizaje y de carreras profesionales, así como de progresión en dichas formaciones y carreras hacen que el ciudadano necesite ser capaz de tomar decisiones eficaces en cada momento en un entorno complicado.

La Unión Europea, consciente de la necesidad, por una parte, de equipar a los ciudadanos con unas habilidades que les permitan gestionar su itinerario de formación, su propio aprendizaje y carrera profesional a lo largo de su vida, y por otra, de promover el espíritu emprendedor, que ha de cristalizar en una cultura empresarial más dinámica e innovadora, recomienda la incorporación de las llamadas habilidades para la gestión de la carrera en las políticas de educación y formación.

La materia «Orientación profesional e iniciativa emprendedora» tiene como finalidad ayudar al alumnado a mejorar su madurez vocacional, preparándoles para tomar decisiones sobre el itinerario formativo y profesional propio, y para afrontar un trabajo y unas condiciones laborales en continuo proceso de cambio, que obligarán a permanentes adaptaciones y a una formación permanente a lo largo de la vida.

Esta materia está planteada como materia común a todas las opciones previstas en cuarto curso dela Educación SecundariaObligatoria, garantizando así que, desde la escolaridad obligatoria, el alumnado pueda realizar un descubrimiento del mundo laboral y de la realidad de algunas profesiones, evaluar y desarrollar algunas de sus habilidades personales y sociales, y tomar decisiones sobre su futuro de formación y/o de empleo desde un mejor conocimiento de la realidad.

La organización del currículo se estructura en torno a tres ejes:

1. Gestión personal y autoconocimiento.

2. Exploración de contextos de formación y de trabajo. Hacia la responsabilidad social.

3. Toma de decisiones y planificación del proyecto personal y profesional.

El criterio para la selección de contenidos responde a la intención última de capacitar para el diseño de un proyecto formativo y profesional personal, a partir del análisis de intereses profesionales y capacidades personales, y de la oferta de formación y de empleo, huyendo de aproximaciones puramente teóricas al mundo laboral, empresarial y financiero.

Los contenidos se organizan en cuatro bloques temáticos.

El primero de ellos, ligado al eje de gestión personal y autoconocimiento, pretende enfrentar el conjunto de características y competencias personales (o potencial profesional) con las informaciones que provienen tanto del análisis del entorno profesional-laboral como de los perfiles explícitos e implícitos de las ocupaciones, para establecer bien un plan de formación ajustado a sus necesidades, bien un reajuste de sus metas.

Como competencias personales y sociales se consideran las relacionadas con tres ámbitos: el autoconocimiento, la iniciativa personal y espíritu emprendedor, y las habilidades sociales y de comunicación.

Además, identifica los valores y cualidades personales y sociales asociados al espíritu emprendedor, distinguiendo entre las habilidades de relación propias del liderazgo y las habilidades de dirección o de gestión. Trata también de superar la percepción tradicional de la iniciativa emprendedora ligada en exclusiva al rol de empresario, para presentarlo como un valor añadido también del trabajador por cuenta ajena.

El segundo y tercer bloque de contenidos responden al eje de exploración de contextos de formación y de trabajo. En ellos se trabaja, por una parte, el conocimiento de los sectores de actividad, también desde el acercamiento a la realidad de la empresa, y el análisis de las distintas profesiones, y por otra, las opciones de formación asociada a cada una de ellas. El funcionamiento del mercado laboral y la aproximación a conceptos básicos económicos y financieros tales como los medios de pago (euro y moneda extranjera; tarjetas de débito y de crédito; transferencias; letras de cambio y cheques), las relaciones con los bancos (instituciones bancarias; depósitos, cuentas, préstamos y créditos; comisiones, reclamaciones, cambio de entidad bancaria; la banca a distancia; la banca ética; fuentes de financiación alternativas) y la protección de datos personales constituyen importantes temas a tratar.

Se analiza el empleo por cuenta ajena y el autoempleo, y la importancia de la iniciativa emprendedora de los individuos en ambos casos. Se plantea un recorrido por los pasos necesarios para la definición de un plan de empresa o de negocio: plan de marketing, plan de producción, plan de recursos humanos, y plan financiero.

Se prestará importancia a la necesidad de la movilidad para la formación y para el empleo. Asimismo se contempla la dimensión de responsabilidad social de la empresa, que ha de propiciar el crecimiento personal y profesional, la satisfacción en el trabajo y la conciliación de la vida personal y laboral.

El cuarto y último bloque está asociado al tercer eje de toma de decisiones y planificación del proyecto personal y profesional. La doble opción de proyecto, bien el diseño de un itinerario formativo y laboral asociado a la elección de una profesión o de un sector de actividad, bien de constitución y puesta en marcha de una empresa, pretende respetar la diversidad de intereses del alumnado.

La opción basada en el diseño de un proyecto formativo-profesional ha de desarrollar las fases de autoanálisis, identificación de fuentes y recursos de información y orientación profesional del entorno, recogida, valoración y selección de la información sobre características socioeconómicas del sector de actividad elegido y prospectiva del mismo, toma de decisiones y diseño de los itinerarios de formación consecuentes, así como las potenciales evoluciones de su itinerario profesional.

La opción de proyecto de constitución de una empresa realiza un recorrido por las distintas etapas que atraviesa un proyecto de creación de empresa: su elaboración, planificación y puesta en marcha.

La intencionalidad de la materia de ejercitar capacidades tales como el autoanálisis, la observación del entorno laboral, la búsqueda de informaciones relevantes del mercado laboral, la capacidad de iniciativa y toma de decisiones, la creatividad, el trabajo en equipo, la planificación del trabajo, o la mejora de las habilidades sociales deben determinar el carácter práctico de esta materia, por lo que es muy importante que los contenidos se orienten a la acción y a la reflexión sobre lo que se hace.

En ningún caso se tratará de buscar un acercamiento al entramado organizativo, legal y económico del mundo laboral desde un planteamiento teórico y expositivo, sino su descubrimiento a partir de la apertura a experiencias fuera del aula, tales como la visita a servicios de orientación profesional del entorno, a entornos laborales reales, o a espacios de formación profesional.

Contribución de la materia a la adquisición de las competencias básicas

El planteamiento integrador de la materia de Orientación profesional e iniciativa emprendedora en sí mismo, en cuanto a la aplicación de los aprendizajes adquiridos, la búsqueda de la realización personal, el ejercicio de la ciudadanía activa, la incorporación a la vida adulta y la capacitación para un aprendizaje permanente a lo largo de la vida, hace de ella una materia que pone el acento en las competencias consideradas básicas en la enseñanza obligatoria.

La competencia de autonomía e iniciativa personal está estrechamente vinculada al propio objeto de estudio. Puede decirse que todo el currículo de la materia contribuye al desarrollo de este competencia, ya que la reflexión y puesta en práctica de un conjunto de valores y actitudes personales interrelacionadas, como la responsabilidad, la perseverancia, el conocimiento de sí mismo, la autoestima, la creatividad, la autocrítica, el control emocional, la capacidad de adaptación, la capacidad de elegir, de calcular riesgos y de afrontar los problemas, así como la capacidad de aprender de los errores, es parte del propio objeto de aprendizaje.

La capacidad de elección basada en criterios definidos, la planificación de las acciones necesarias para desarrollar proyectos personales anticipando y asumiendo los posibles riesgos, la flexibilidad para percibir el cambio como oportunidad, o la iniciativa para imaginar y emprender son elementos esenciales de esta materia.

Las dimensiones relacionadas con la vertiente más social de esta competencia, esto es, las relacionadas con habilidades sociales para relacionarse, cooperar y trabajar en equipo y con las habilidades para el liderazgo, la dirección de proyectos o la iniciativa emprendedora están presentes a lo largo de toda la materia.

La metodología propia de la materia contribuye igualmente al desarrollo de la competencia de autonomía e iniciativa personal, ya que hace posible que el alumnado se enfrente a los problemas de forma autónoma y creativa, así como que se plantee diversas opciones y estrategias.

La competencia para aprender a aprender supone disponer de herramientas que faciliten el aprendizaje, tener una visión estratégica del ámbito en que ha de tomarse una decisión, y saber prever y adaptarse a los cambios desde una visión positiva, siendo capaz de controlar y gestionar las propias capacidades y conocimientos.

En este caso, la materia capacita para continuar aprendiendo y tomando decisiones de manera cada vez más eficaz y autónoma, a partir de la adquisición de la conciencia de las propias capacidades y las estrategias para desarrollarlas, la valoración del compromiso personal y el esfuerzo y el manejo de manera eficiente de los elementos a su alcance.

Favorece las habilidades para obtener información, el conocimiento de los diferentes recursos y fuentes para la recogida, selección y tratamiento de la misma, así como la integración de todas las informaciones para definir metas progresivas y realistas a nivel formativo y laboral.

En el desarrollo de la competencia social y ciudadana, la contribución es relevante. La materia contribuye a entender rasgos de las sociedades actuales, a tomar conciencia de la existencia de distintas perspectivas al analizar la realidad socioeconómica y laboral, y a desarrollar habilidades complejas como la toma de decisiones y la responsabilidad que éstas llevan asociadas.

El trabajo en habilidades sociales y de relación interpersonal, aprendiendo a valorar los intereses individuales y los del grupo, la práctica del diálogo y la negociación como fórmula de resolución de conflictos, el respeto por el otro y el trabajo en común le capacita para ejercer la ciudadanía en el ámbito profesional, pero también en su vida personal.

Contribuye también a esta competencia la valoración positiva de las diferencias, a la vez que el reconocimiento de la igualdad de derechos entre diferentes colectivos. Asimismo, está presente al potenciar un comportamiento coherente con los derechos humanos y los valores democráticos, lo que implica disponer de habilidades como la toma de conciencia de los propios pensamientos, valores y acciones, y el control y regulación de los mismos. La toma de conciencia de la responsabilidad social de la empresa, la contribución activa y voluntaria a la mejora social, económica y ambiental, constituyen un valor añadido a la competencia social y ciudadana.

El peso que tiene en esta materia la capacidad de interpretar y comprender las informaciones de la realidad formativa o laboral, la organización y autorregulación del pensamiento y su plasmación en proyectos determina la aportación a la competencia en comunicación lingüística.

Desde la materia se trabaja la expresión de ideas y opiniones, el diálogo, el enjuiciamiento crítico, la coherencia en el discurso y en la planificación de tareas. Igualmente, se insiste en las habilidades de comunicación para establecer vínculos y relaciones constructivas con los demás, en concreto en el ámbito laboral con personas de igual o diferente nivel profesional.

El manejo de las convenciones sociales en situaciones como la búsqueda activa de empleo, la utilización eficaz de los códigos lingüísticos y no lingüísticos propios del intercambio comunicativo son elementos esenciales que contribuyen a la consecución de esta competencia.

La contribución a la competencia en el tratamiento de la información y competencia digital viene dada por el trabajo de las destrezas relativas a la búsqueda, obtención y comprensión de información, elemento imprescindible y previo para abordar buena parte de los contenidos de la materia. Es objeto de esta materia la localización de la información, las posibles fuentes y los diversos soportes (oral, impreso, audiovisual, digital o multimedia), así como la transformación de esa información en conocimiento.

Se trabajan las habilidades complejas de organizar, relacionar, analizar, sintetizar, contrastar, hacer inferencias y deducciones a partir de la información obtenida.

En concreto, la competencia digital es fundamental para acceder a una información actualizada sobre las oportunidades de formación y las características del mercado laboral, sectores de actividad, profesiones, o evolución y tendencias del mercado. Es importante insistir en la importancia de gestionar de manera responsable la información que se comparte en redes sociales y otros espacios de Internet, valorando las repercusiones que puede tener tanto en la imagen personal pública como en futuras oportunidades laborales.

Esta materia constituye una buena herramienta para el desarrollo de la competencia en el conocimiento e interacción con el medio físico, mediante el desarrollo de la capacidad y disposición para observar la influencia de la actividad económica en el medio físico. La puesta en valor de las demandas sociales hacia la empresa, sus desafíos para hacer compatible el crecimiento económico con criterios de sostenibilidad, respeto ambiental y mejor calidad de vida son cuestiones que colaboran al desarrollo de esta competencia.

La competencia matemática no solo se trabaja en los aspectos más evidentes del proyecto de creación de una empresa, en la valoración de la viabilidad de la misma, el cálculo de costes, el análisis o realización del presupuesto de tesorería, o el balance o la cuenta de resultados.

Además, parte de los datos a manejar como información laboral (niveles de ocupación por sectores o por ocupaciones, relación entre formación y empleo, evolución de oferta y demanda de empleo por sectores, etc) exigen en primer lugar la interpretación de formas de expresión matemáticas, pero también el establecimiento de cadenas argumentales identificando los datos esenciales, y estimando y enjuiciando las informaciones para una posterior toma de decisiones.

Por último, la contribución a la competencia cultural y artística se realiza desde la práctica del pensamiento divergente y del trabajo colaborativo, como elementos básicos para la innovación, la creatividad y la iniciativa emprendedora. Ello conducirá a actitudes abiertas y respetuosas hacia nuevas propuestas en el ámbito profesional que podrán extrapolar a su relación con las manifestaciones culturales y artísticas.

Objetivos

1. Mejorar el conocimiento de sí mismo y el desarrollo de capacidades y actitudes activas, que permitan establecer un proyecto de carrera profesional adecuado y capaciten para responder posteriormente de manera flexible y eficaz a los cambios que se producirán a lo largo de la vida a nivel personal y profesional con espíritu emprendedor.

2. Desarrollar habilidades para interactuar con los demás de manera positiva y eficaz en cualquier contexto de vida o trabajo.

3. Establecer la relación entre el trabajo escolar, la formación a lo largo de la vida y el desarrollo de una trayectoria profesional.

4. Buscar, interpretar, evaluar y utilizar información relacionada con la definición de itinerarios formativos y profesionales, manejando las Tecnologías dela Informaciónyla Comunicacióncomo herramientas básicas para cualquier toma de decisiones.

5. Comprender la influencia de las demandas sociales y económicas en la naturaleza y la estructura de trabajo.

6. Conocer las características de las profesiones ligadas a los diferentes sectores de actividad, abriendo su horizonte personal más allá de las representaciones elaboradas a partir de los estereotipos o expectativas de su entorno.

7. Analizar la prospectiva del mercado laboral en el entorno socioeconómico local, regional, nacional e internacional.

8. Tomar conciencia del significado de la cultura emprendedora y de la necesidad que tiene la sociedad de la aportación de los emprendedores para generar riqueza económica y social.

9. Desarrollar la iniciativa emprendedora como medio para generar oportunidades de empleo y negocio.

10. Tomar conciencia de los problemas ecológicos y de las desigualdades existentes en la distribución de la riqueza por razón de sexo, condición social, territorial e ideológica, y adquirir actitudes que favorezcan la igualdad de oportunidades y un desarrollo sostenible.

11. Realizar una aproximación a un entorno real de trabajo que permita descubrir una amplia gama de ocupaciones de diferentes niveles de cualificación.

12. Detectar necesidades económicas y sociales e identificar, analizar y evaluar oportunidades de negocio, valorando las posibilidades y recursos existentes, determinando la viabilidad de los correspondientes planes de empresa

13. Comprender algunos aspectos básicos de los sistemas jurídico, económico y financiero, que permitan desenvolverse en el mercado laboral como asalariado o como empresario.

14. Desarrollar habilidades ligadas a la búsqueda, obtención o creación de un puesto de trabajo y a su mantenimiento.

15. Conocer y diseñar el proceso propio de itinerario formativo y profesional, explorando todos los posibles escenarios que se adecuen a sus expectativas.

Contenidos

Bloque 1. Habilidades para la gestión personal de la trayectoria formativa y profesional

– Competencias personales y sociales transferibles a una variedad de contextos de trabajo:

▪ Autoconocimiento: Autonomía personal y autodeterminación; capacidad autocrítica; búsqueda de información; organización del tiempo; capacidad de adaptación y gestión del cambio; tratamiento de la información y competencia digital.

▪ Iniciativa personal y espíritu emprendedor: creatividad e innovación; sentido de la responsabilidad; confianza en uno mismo y eficacia; optimismo inteligente y estilo atribucional; capacidad de asumir riesgos; tenacidad y espíritu de superación.

▪ Habilidades sociales y de comunicación: tolerancia, respeto, iniciativa y liderazgo, trabajo en equipo; gestión de proyectos y resolución de problemas. La comunicación verbal y no verbal; escucha activa, empatía. Manejo de idiomas.

– Competencias personales y sociales ligadas al espíritu emprendedor:

▪ Habilidades de relación: cooperación y trabajo en equipo; comunicación empresarial; asertividad; persuasión y autoridad moral; sensibilidad hacia las necesidades de los demás, empatía y asertividad.

▪ Habilidades de dirección: dirección y liderazgo; asunción de responsabilidades y delegación; gestión y organización; planificación y programación; toma de decisiones; resolución de problemas; motivación y madurez profesional; habilidad negociadora.

Bloque 2. Exploración de contextos de formación y de trabajo. Hacia la responsabilidad social

– Programas y oportunidades de formación, instituciones educativas y de formación, programas y servicios gubernamentales y no gubernamentales y oportunidades de empleo. Ayudas a la formación.

– Sectores de actividad, tendencias laborales y demandas del mercado. Yacimientos de empleo.

  • § La investigación, la innovación y las TIC como motores de la economía y como fuentes de nuevos perfiles profesionales.
  • § Nuevas formas de trabajo derivadas del desarrollo tecnológico: colaboración y empresas en red; comunicación online entre empresas; creación de redes propias.

– Descubrimiento del mundo profesional: análisis de profesiones y exigencias de competencias asociadas. Puestos de trabajo en la economía formal. Oportunidades de autoempleo. Oportunidades de movilidad.

– El entorno profesional: observación de diversas situaciones profesionales en entornos reales.

– Hacia una sociedad emprendedora: dinamismo de la sociedad actual; la sociedad del conocimiento; la formación continua, la multidisciplinaridad y el entorno de apoyo al emprendedor.

– La empresa productiva, sostenible y ética:

▪ Ética empresarial y responsabilidad de servicio público. La empresa humanista: la no discriminación. La responsabilidad social de la empresa. Jóvenes impulsores del cambio. Participación ciudadana activa.

▪ Globalización y sostenibilidad. Coherencia y sostenibilidad de los proyectos solidarios. El comercio justo.

– Mercado laboral, proyección social y sostenibilidad.

  • § Entorno socioeconómico local, regional, nacional e internacional; características y demandas sociales del entorno. Previsiones a corto, medio y largo plazo a tener en cuenta en la toma de decisiones en un plan de carrera profesional. EI mercado europeo como escenario de los proyectos empresariales.

– El espíritu emprendedor:

▪ El espíritu emprendedor: concepto y definición. Evolución histórica. La figura del emprendedor. Importancia de la cultura emprendedora y sus repercusiones sociales. Utilidad en todas las actividades laborales y en la vida cotidiana.

▪ Aprender a emprender. Fomento del espíritu emprendedor. Recursos, iniciativas y experiencias. Importancia de estar abierto a otras culturas, a los avances tecnológicos y a la innovación. El fomento del espíritu emprendedor en la política europea y en la legislación española.

– Emprendedores sociales y liderazgo como vocación de servicio. Ideas y proyectos de carácter social: iniciativas para mejorar la comunidad.

Bloque 3. Mercado laboral y economía financiera

– Empleo por cuenta ajena. Acceso a las ofertas de empleo pública y privada. Técnicas y estrategias para buscar empleo.

– El autoempleo:

  • § El trabajador autónomo individual o free lance: caracterización del trabajador autónomo; el Estatuto del Trabajador Autónomo; el Trabajador Autónomo Económicamente Dependiente (TRADE).
  • § La idea de negocio a partir de la detección de oportunidades en el entorno, importancia del factor diferenciador y de la innovación. Fases del proyecto de empresa: plan de marketing; plan de producción; plan de recursos humanos; plan financiero. Fórmulas de apoyo y estímulo a la creación de pequeñas empresas.

– Conceptos básicos de economía: la actividad económica, los agentes económicos y los sectores económicos.

– Conceptos básicos financieros: el dinero, el tipo de interés, la inflación, el sistema financiero, el mercado de valores. Relación con la banca. Medios de pago.

Bloque 4. Desarrollo y gestión de un plan de carrera profesional

– Elaboración de un proyecto o plan de carrera formativa y profesional: definición de metas y aspiraciones, y toma de decisiones fundamentadas.

Opción A. Diseño de un itinerario formativo y laboral asociado a la elección de una profesión o de un sector de actividad.

Opción B. Proyecto de constitución y puesta en marcha de una empresa.

Criterios de evaluación

1. Reconocer las competencias personales y sociales que generan empleabilidad, realizando un balance personal de las mismas de manera objetiva y crítica, así como un plan de entrenamiento de aquellas más deficitarias.

Con este criterio se pretende comprobar si se sabe cuáles son las habilidades de autoconocimiento, iniciativa personal, espíritu emprendedor, y las habilidades sociales y de comunicación que demanda el mercado de trabajo como competencias complementarias a las competencias profesionales, y si disponen de las claves para analizar su situación personal respecto a ellas y elaborar un plan para el entrenamiento o formación en aquellas deficitarias.

2. Identificar y describir las principales competencias y cualidades personales y sociales asociadas al espíritu emprendedor, y el modo en el que se pueden desarrollar.

Este criterio trata de evaluar si el alumnado sabe reconocer los rasgos que caracterizan a la persona emprendedora.

3. Apartir del análisis de casos, proyectos e iniciativas emprendedoras reconocer los distintos tipos de emprendedores y su evolución histórica.

 Con este criterio se pretende comprobar si el alumno ha comprendido el concepto de cultura emprendedora, los distintos tipos de emprendedores y su evolución a lo largo del tiempo.

4. Analizar la responsabilidad social de las empresas, describiendo los costes sociales y los beneficios sociales que pueden reportar.

Con este criterio se pretende comprobar si los alumnos son capaces de reconocer los efectos positivos y negativos de la actuación de las empresas en el entorno en el que desarrollan su actividad.

5. Emplear adecuadamente las tecnologías de la información y la comunicación, así como todas los demás recursos y fuentes de información disponibles para obtener información sobre oportunidades de formación y de empleo.

Este criterio evalúa la destreza en la localización de información, el manejo correcto de las diversas fuentes y recursos, e incluso la gestión responsable de la información compartida en redes sociales y otros espacios de Internet. Se trata igualmente de comprobar si se utilizan las posibilidades que proporciona un procesador de textos o una presentación, por ejemplo, en la presentación de su proyecto.

6. Describir las características propias del sector o sectores de actividad y de las profesiones que le interesen e interpretar los datos relativos a las tendencias del mercado laboral en dichos sectores y profesiones.

Se trata de evaluar si se conocen los distintos sectores de actividad, una variedad de profesiones asociadas a cada uno de ellos. Deben identificar los perfiles profesionales explícitos e implícitos ligados a una ocupación, reconociendo las competencias requeridas para desempeñar satisfactoriamente un puesto de trabajo y las características habituales de desempeño de la profesión.

7. Participar activamente en la exploración de las oportunidades de formación, de las profesiones y del funcionamiento de las empresas, poniendo en juego su espíritu emprendedor.

Este criterio evalúa las capacidades de investigación, iniciativa, trabajo en equipo, búsqueda de información, y apertura a la realidad sociolaboral del entorno, así como el conocimiento de las características de las organizaciones laborales y de sus puestos de trabajo. Evalúa además la capacidad de poner en relación una determinada profesión con la oferta de formación permanente asociada a la misma.

8. Manifestar actitudes, capacidades y habilidades sociales y de dirección en las tareas grupales que se realizan en el aula y en las actividades extraescolares.

Con este criterio se pretende comprobar si el alumnado manifiesta iniciativa y se comporta de manera eficiente y solidaria en las diferentes actividades grupales. Trata también de evaluar su capacidad de desenvolverse con autonomía en contextos ajenos al aula.

9. Valorar el papel del emprendedor y de la empresa como elemento básico de la sociedad y como organización que puede favorecer la igualdad y la solidaridad entre las personas, permitir el enriquecimiento personal y profesional, y conciliar el trabajo y la vida personal.

Con este criterio se pretende averiguar si al analizar una situación concreta los alumnos son capaces de valorar la importancia de la iniciativa emprendedora, la aportación a la sociedad del entramado empresarial, y el papel que la organización del trabajo tiene en la promoción de la igualdad, la solidaridad y la conciliación de la vida laboral y familiar.

10. Identificar la influencia de la globalización y de la necesidad de un desarrollo sostenible en los nuevos proyectos innovadores, describiendo las características de estos proyectos en entornos próximos y las necesidades de formación permanente que implican.

Con este criterio se pretende determinar si los alumnos son capaces de detectar las características que debe tener una empresa innovadora en el entorno socioeconómico actual y la necesidad de formación permanente como elemento imprescindible ligado a la innovación.

11. Identificar los pasos a dar para acceder al empleo por cuenta ajena o al autoempleo.

Este criterio evalúa el dominio de las habilidades ligadas a la búsqueda, obtención o creación de un puestos de trabajo, tales como cartas de presentación, elaboración de currículum vitae, entrevistas de trabajo, cumplimentación de documentación para la creación de una empresa, etc.

12. Identificar las condiciones de trabajo del trabajador autónomo individual o free lance y las características personales, sociales y profesionales que se requieren, referidas a una profesión autónoma concreta.

Con este criterio se pretende comprobar que el alumno, al elegir una salida laboral como profesional, es capaz de plantear su ejercicio como un trabajo autónomo individual así como asumir las características del ejercicio con madurez profesional.

13. Reconocer los principales documentos y productos bancarios –depósito, préstamo, cuenta, tarjetas de crédito y de débito–, así como conocer las recomendaciones sobre seguridad y protección de datos personales en relación con las operaciones bancarias.

Con este criterio se pretende comprobar si los alumnos son capaces de diferenciar la utilidad y uso de las operaciones bancarias más habituales.

14. Definir una idea de negocio, a partir de un estudio de mercado y de la detección de necesidades sociales y oportunidades de negocio y desarrollar un proyecto de plan de empresa que desarrolle los diferentes planes que integran el plan de negocio.

Este criterio evalúa si el alumnado es capaz de descubrir una potencial idea de negocio que pueda ser la base de un proyecto empresarial, y de valorar su viabilidad, analizando la información obtenida en el estudio de mercado.

15. Diseñar el propio proyecto de itinerario formativo y profesional, incorporando las tres fases de autoconocimiento del potencial profesional, conocimiento del entorno socio-profesional y laboral, y toma de decisiones.

Este criterio evalúa la capacidad de integrar todos los elementos trabajados en la materia (información sobre oportunidades de formación, oportunidades de empleo, descubrimiento de las profesiones y los perfiles profesionales, autoanálisis, etc.) para plantear unas metas personales y diseñar las acciones a recorrer para su consecución. (…)»