debates dentro del campo de las y los defensores de los animales no humanos

Los defensores de los animales deberíamos pensar a fondo algunas contradicciones en lo que atañe a la idea de liberación animal… A mí, el entusiasmo de destacados líderes del movimiento (como Leonardo Anselmi) por las investigaciones biotecnológicas que a comienzos del siglo XXI persiguen fabricar carne sintética me desconcierta. ¿Deberíamos buscar la alianza con las transnacionales biotecnológicas que en algún momento quizá pongan en el mercado chuletones sintéticos patentados–o más bien con los campesinos pobres que en sus pequeños predios crían unas pocas gallinas, un par de cerdos, una vaca?

O bien: ¿están correctamente orientadas las campañas para eliminar la tracción animal en el transporte –como las vemos en algunas metrópolis del Sur como Bogotá–, cuando sabemos que ello conducirá a aumentar las emisiones de dióxido de carbono en un planeta aquejado de calentamiento climático? Y todavía más cuando sabemos que una transformación ecológica de la economía aumentará las necesidades de trabajo humano y de trabajo animal… (Recordemos como los campos cubanos, durante el “período especial” en los años noventa que tuvo algo de prefiguración de lo que el peak oil causará de forma generalizada, se despoblaron de tractores y se llenaron de bueyes…)