«Las curvas exponenciales de la degradación medioambiental no son otra cosa que la manifestación de la ley fundamental del capitalismo: “Siempre más”. Un capitalismo sin crecimiento es una contradicción en sus propios términos. La explicación es simple: en este sistema basado en la competencia por el beneficio, cada propietario individual de los medios de producción está obligado a buscar permanentemente reducir sus costes, especialmente sustituyendo a trabajadores por máquinas que aumenten la productividad del trabajo. Este requisito es completamente imperativo: quien quisiera sustraerse a él sería inmediatamente condenado a la muerte económica. Por tanto, el capitalismo es por esencia, productivista. Siempre produce más mercancías, lo que implica apropiarse y saquear más recursos naturales, explotar siempre más la fuerza de trabajo -sea directamente en la producción, sea indirectamente en los servicios y en la reproducción de la fuerza de trabajo-, y destruir siempre los saberes y las lógicas alternativas a su propia “lógica” bulímica…»
- Texto completo en http://www.vientosur.info/spip.php?article10415
- Y véase también http://www.lcr-lagauche.org/la-cop-21-sommet-provisoire-du-mensonge-du-business-et-du-crime-climatiques/
- (Y en inglés: http://amandla.org.za/the-ipcc-report-between-nightmare-and-revolution/ )