Si hemos de tomar distancia frente al ego, no te quiero contar respecto a las concesionarias de automóviles.
A quienes hablan de espiritualidad y sostenibilidad, hablarles de lucha de clases; a quienes hablan de ecología y lucha de clases, hablarles de espiritualidad.
El ego es sucio, así que un poco de higiene mental. Pero Coca-cola y el Banco Santander son todavía más sucios, así que un poco de higiene socioeconómica…