if it ain’t broke, don’t fix it

Si funciona, no lo arregles, dicen los anglosajones. Éste debería ser el primer principio del urbanista –pero qué ajeno les resulta a la gran mayoría de los responsables de las ciudades y pueblos españoles, nuestras urbes sometidas a tan terribles destrozos…

Sea un medio de transporte tan eficiente y refinadamente urbano como el tranvía, por ejemplo. ¿Qué necesidad había de destruir las redes de transporte tranviario en todas las ciudades españolas –sólo para tratar de recuperarlas decenios después, con ese “quiero y no puedo” de los tranvías posmodernos en las ciudades gentrificadas de un país que se entregó a los sueños de los nuevos ricos?