Peter Singer –en Una izquierda darwiniana— evoca la camiseta que vestía en sus tiempos el famoso negociante de Wall Street Ivan Boesky (quien sirvió de modelo a Oliver Stone para su personaje de Gordon Gekko en la película Wall Street): en ella estaba impreso “Gana el que tenga más juguetes cuando se muera”. Vale la pena reparar no sólo en la ideología de competencia destructiva y acumulación consumista que vehicula el lema, sino también en el muy preciso término juguetes, que nos remite a al infantilismo del mundo cultural que crea el capitalismo…
Exactamente en las antípodas de ese ethos, y sin salir de Nueva York, vale la pena traer a colación la hermosa anécdota protagonizada por Enrique Morente que cuenta su amigo y colaborador Juan Verdú. El cantaor estaba paseando con sus músicos por la calle 52 y se encontró con tres homeless negros, que tocaban recipientes de detergentes como si fueran tambores. “Se paró, pidió a los músicos que le hicieran palmas y se puso a cantar. A mí me dio todos los dólares que tenía y me pidió que fuera a comprarles perritos calientes o lo que encontrara. Cuando volví, ya se había formado un corrillo de gente que aplaudía y echaba dinero. Al final, se abrazó con los indigentes y nos fuimos. Y me dijo al oído: ‘¡Si todos somos mendigos en este mundo! El problema, Juan, es que no nos damos cuenta de nuestra propia miseria’.”