los dos grandes valores

Los dos grandes valores: el florecimiento de la vida y la pacificación de la existencia. Son el alfa y el omega, e importa darse cuenta de la contradictoria tensión del arco que trazan. El florecimiento de la vida entraña un festival de crueldad: el valor vida es la base sobre la que pueden alzarse todos los demás valores (sin seres vivos no habría valores), pero la biosfera es el lugar donde un ser vivo devora a otro, para ser a si vez devorado por un tercero. Por eso, en el extremo del arco, la pacificación de la existencia humana: ser capaz de responder al trauma de la finitud –tratar de situarse frente al horizonte de la muerte– con una respuesta de compasión, auxilio y cuidado (en vez de intentar la inútil huida hacia delante del que busca siempre la dominación).Veintiséis siglos después, Buda sigue siendo la mejor respuesta de la humanidad frente a las preguntas de Darwin.