En dos páginas consecutivas del diario –haz y envés–, Albert Einstein dice socarrón: “Nunca pienso en el futuro, llega demasiado pronto”. Y el nonagenario Ramón Xirau añade melancólico: “Lo importante no es lo vivido, lo importante es que estamos en este mundo aquí y ahora”. Ah, el misterioso plexo del tiempo… Se trata, sí, de estar ahí.