medios de subsistencia

Un detalle que se me había escapado, y que leí esta mañana en la prensa: el asesino noruego Anders Breivik –que liquidó a sangre fría, el pasado 22 de julio, a 77 personas, varias decenas de ellas adolescentes que participaban en la acampada de las Juventudes Laboristas en la isla de Utoya— se mantuvo, durante los años de minuciosa preparación de su crimen, gracias a lo que había ganado vendiendo diplomas universitarios falsificados en Internet. Casi medio millón de euros entre 2003 y 2006.