Quienes hubieran debido ver no miraron.
Quienes hubieran debido oír no escucharon.
Quienes hubieran debido recordar prefirieron distraerse.
Quienes hubieran debido precaverse se entregaron.
Quienes hubieran debido actuar permanecieron pasivos.
Quienes hubieran debido cooperar se blindaron de indiferencia.
Nada de lo que iba a pasar y se veía venir era inevitable. Pero dejaron que ocurriera.