¿Cómo responderían nuestros contemporáneos a tal pregunta? Simplificando bastante las cosas, uno diría que hoy la humanidad se divide en dos grandes bandos. La mayoría contestaría que, sin lugar a dudas, la civilización es internet (culminando el asunto en ese dibujo de El Roto, en su serie “Cajero automático”, donde se muestra un ataúd con su letrerito de feria de muestras descansando encima: “Con wifi”). La minoría pensamos que la civilización es la posibilidad de que lleguemos finalmente a ser primates morales (quiero decir, que de verdad encarne en nuestras instituciones y en nuestra vida cotidiana una ética digna de tal nombre y una conciencia de especie). El desenlace de esa pugna secular aún está abierto.