si los ‘wet dreams’ del tecnocapitalismo se materializan, será sólo para una pequeña parte de la humanidad

La retórica de la inevitabilidad de la tecnociencia: “si la ciencia nos da la oportunidad de mejorar nuestros cuerpos y mentes, es iluso pensar que eso puede frenarse”; “la robotización es irremediable”; “la casa conectada y este asunto del internet de las cosas pronto serán una realidad sin vuelta atrás”… Todo este determinismo tecnológico brota turgente hojeando apenas durante tres minutos el número 20 de la revista Retina, un prontuario de propaganda del mundo digital que regala PRISA junto con el diario El País. Se les olvida añadir un pequeño detalle: si los wet dreams del tecnocapitalismo se materializan, será sólo para una pequeña parte de la humanidad, los sobrevivientes en un mundo infernal. Antes, muy posiblemente, diecinueve de cada veinte seres humanos habremos sido eliminados.

Vaya cenizo –valiente catastrofismo –cómo exageras, macho… Ya oigo las protestas. Bueno, amigos y amigas, infórmense un poco sobre lo que significará vivir en el planeta Tierra durante el Siglo de la Gran Prueba. El BAU (Business As Usual, con todos esos avances del capitalismo digital) nos lleva al exterminio de la gran mayoría de la humanidad, si no a su extinción total –y no a largo plazo. Basta con asumir de verdad la situación en lo que respecta a la crisis climática para darse cuenta de esto.

En efecto, hoy el BAU (usemos este acrónimo por no decir: el tanatocapitalismo que nos gobierna) dirige al planeta Tierra hacia 4°C de calentamiento, si nos basamos en los compromisos de reducción de emisiones de GEI contraídos hasta ahora. Los compromisos de París suponen una senda de calentamiento de alrededor de 3’3°C, según los expertos; pero eso no incluye algunas retroalimentaciones del ciclo del carbono que ya se están activando (por ejemplo, deshielo del permafrost ártico, desforestación del Amazonas, otras mermas en la capacidad natural biosférica de almacenar carbono) que empujarían ese calentamiento hacia los 5°C. “Entonces, decir que estamos actualmente en un camino de 4°C es correcto”.[1] Se podrían superar los 4-5ºC incluso en fechas tan tempranas como 2050, si las cosas van realmente mal.[2] Ahora bien, destacados climatólogos han conjeturado que eso puede suponer el exterminio del 95% de la humanidad.[3]

 

 

[1] David Spratt, “At 4°C of warming, would a billion people survive? What scientists say”, climatecodered.org, 18 de agosto de 2019; https://www.climatecodered.org/2019/08/at-4c-of-warming-would-billion-people.html?m=1

[2] Yangyang Xu y Veerabhadran Ramanathan, “Well below 2 °C: Mitigation strategies for avoiding dangerous to catastrophic climate changes”, PNAS, 26 de septiembre de 2017; https://www.pnas.org/content/114/39/10315

[3] En mayo de 2019, Johan Rockström, director del Instituto Potsdam para la Investigación del Impacto Climático, dijo a The Guardian que en un mundo 4°C más cálido “es difícil ver cómo podríamos acomodar a mil millones de personas o incluso la mitad de eso… Habría una minoría rica de personas que podría sobrevivir con estilos de vida modernos, sin duda, pero será un mundo turbulento y conflictivo”. Rockström es uno de los principales investigadores del mundo en tipping points (puntos de inflexión climáticos) y safe boundaries (“límites seguros” para la humanidad). Véase Gaia Vince, “The heat is on over the climate crisis. Only radical measures will work”, The Guardian, 18 de mayo de 2019; https://www.theguardian.com/environment/2019/may/18/climate-crisis-heat-is-on-global-heating-four-degrees-2100-change-way-we-live

En un encuentro científico internacional sobre cambio climático realizado en Melbourne en noviembre de 2012 (en la antesala de la COP18 de Doha), algunos de los más relevantes investigadores del mundo estimaron lo que podría pasar con un aumento de cuatro grados centígrados o más (sobre las temperaturas preindustriales promedio). Para Hans Joachim Schellnhuber (fundador y director del Instituto Postdam para la Investigación del Impacto Climático –PIK- y director del Consejo Asesor Alemán sobre el Cambio Climático –WBGU-), la capacidad del planeta para albergar seres humanos en caso de una subida de cuatro grados se reduciría a “menos de 1.000 millones de personas”.

Unos años antes el profesor Kevin Anderson (director del Centro Tyndall para el Cambio Climático en Gran Bretaña) se dirigió a la prensa durante la fallida conferencia de Copenhague, en 2009: “Para la humanidad es cuestión de vida o muerte… [un aumento así] no conducirá a la extinción del ser humano, ya que unos pocos afortunados, con los recursos adecuados, podrán desplazarse a las partes apropiadas del planeta y sobrevivir. Pero creo que es extremadamente improbable que evitemos una mortandad masiva con cuatro grados de aumento”. En aquella ocasión Anderson se atrevió a dar cifras: “Si en el año 2050 la población mundial es de 9.000 millones y la temperatura se eleva 4, 5 o 6 grados, los supervivientes podrían ser del orden de 500 millones”. Si echamos cuentas, eso es hablar de una mortandad de casi el 95%. Cf. Miguel Artime, “Cuatro grados más o cómo decir adiós a casi el 95% de la humanidad”, blog Cuaderno de ciencias, 15 de noviembre de 2012; https://es.noticias.yahoo.com/blogs/cuaderno-de-ciencias/cuatro-grados-m%C3%A1s-o-c%C3%B3mo-decir-adi%C3%B3s-casi-161726996.html